Es una podenquita mediana y viejita, ya no cumple diez años, pero sus ganas de vivir, su viveza, su simpatía, hacen que sea una maravilla tenerla cerca. Siempre esta rondando a los seres humanos, solo quiere un poco de atención y mimos y todavía disfruta paseando. Se lleva bien con otros perros y por lo menos aquí no saca mucho su instinto cazador. Es tranquila, obediente y mimosa, muy mimosa. Es la primera en darme los buenos días. Será una compañía muy agradable para esa familia que la esta buscando seguro.
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