HITEÑO
A Hiteño lo abandonaron a plena luz del día cerca del refugio. Lo encontramos en los huesos, hambriento y permanecía inmóbil en el sitio donde lo abandonaron. Costó un poquito ganarnos su confianza, pero enseguida entendió que solo queríamos ayudarlo. Ahora es el perro más feliz y agradecido, aunque sigue teniendo un poco de ansiedad con la comida. Es muy guapo y está listo para emprender un nuevo viaje, ahora con una familia. Nació en noviembre de 2019.